25 Oct TOM CURREN PRUEBA EL RANCHO DE OLAS DE SLATER

El enigmático surfer de Santa Bárbara Tom Curren es una leyenda del surf profesional. Tres veces campeón del mundo –en 1985, 1986 y 1990–, su estilo incomparable le convirtió en una de las figuras más respetadas e influyentes en la historia de este deporte.

El periodista de surf Chris Mauro llegó a escribir de él: “Sus títulos mundiales trajeron de vuelta la salvación y la inspiración al surf americano, pero fue la humildad de Curren, su huida del bombo, y, por supuesto, su intempestivo talento natural los que tuvieron la mayor influencia”.

Con dos años, Tom se subió por primera vez a una surfboard y con seis ya surfeaba de forma regular, gracias a la influencia de su padre, Pat Curren, pionero del surf en las Big Waves. Su niñez anticipaba marco la increíble trayectoria profesional que vendría después.

Pocos surfers profesionales pueden compararse con Tom Curren, pero uno de ellos podría ser el mítico Kelly Slater. Nacido en Florida, a los cinco años comenzó a surfear y a los once ya era un competidor amateur imparable. A sus espaldas, once títulos mundiales y el honor de ser el surfista profesional con más victorias y campeonatos del mundo.

Pero hay algo que Kelly posee y Tom no: una máquina de fabricación de olas. Nos referimos a la Kelly Slater Wave Company, el rancho de olas artificiales del norteamericano que ofrece el barrel más largo del mundo hecho por el hombre.

Recientemente, Tom se acercó a las instalaciones de su amigo y nos deleitó con estas espectaculares imágenes.

¡Disfrutad!

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