31 Mar La lucha de ser mujer y surfear en Irán
La lucha de ser mujer y surfear en Irán se llama “We surf in Irán”
Todo comenzó en el 2010 con un proyecto de la surfista Easky Britton y la directora y cámara Marion Poizeau de introducir el surf para la mujer y una crítica al “hijab” por tener que llevarlo las mujeres en las playas en Irán.
Después de dos años de lucha por parte de estas dos “valientes luchadoras”, en el 2012 consiguen que estas mujeres Mona Seraji y Shahla Yasini sean las primeras iraníes en surfear. En declaraciones de la cineasta Pizeau en lainformacion.com
“Los valores del deporte son fundamentales para la lucha por la igualdad”
Todo comenzó inesperadamente. La cineasta Marion Poizeau y Easky Britton se pusieron en contacto gracias a un amigo en común, y la deportista le comentó la posibilidad de ir a Baluchistán, una zona de gran oleaje donde nadie nunca había surfeado.
“Easky había estado en Pakistán y sabía que había muchas olas allí. Nadie tenía conocimiento del surf en Irán. Así que quedamos en Teherán para acercarnos y grabar unas imágenes”, explica Poizeau.
Easky Britton surfeó ante la mirada atónita de los habitantes locales que le dieron una buena acogida. “Estaban contentos y sorprendidos a la vez, al ver un deporte nuevo en su vida”, afirma Marion Poizeau. No en vano, habían sido testigos de la primera mujer surfista en Irán.
El vídeo titulado “Iran Surfing” se hizo viral en Internet y cuajó incluso entre las autoridades iraníes, en una sociedad en la que las mujeres tienen que vestir el hijab (velo que cubre cabeza y pecho) en todas las playas públicas, y donde tienen prohibido asistir como público a partidos de voleyball masculino.
Dirigida por Marion Poizeau, el documental muestra cómo tres mujeres jóvenes, la irlalndesa Easkey surfista profesional , la iraní Mona snowboarder profesional y la iraní Shalha buzo, ellas están introduciendo un nuevo deporte en Irán: SURF.
A través de los ojos de estas tres personajes principales, el espectador experimenta el viaje desde una perspectiva única e inusual lleno de corazón y emoción. Después de la introducción de las tres protagonistas, la película revela su viaje a la región sureste de Irán, Baluchistán, donde Mona y Shalha van a aprender a surfear con Easkey.
Las tres comparten una pasión y la creencia en el poder del deporte, especialmente el surf, como una forma de romper las barreras sociales y culturales, y para conectarse con otros.
Estas tres mujeres están animando a más gente a unirse a ellas y cómo el surf es aceptado y practicado por la comunidad local baluchi. Su entusiasmo por este nuevo deporte y la emoción en las oportunidades que podía ofrecer crece.
“Juntas están sembrando la semilla de surf en Irán y haciendo historia con la creación del primer club de surf iraní.”
El film también capta la diversidad y complejidad de Irán, que documenta el contraste entre la zona rural y tradicional de Baluchistán y la ciudad en la capital de Teherán, donde el deporte ya está bien desarrollado.
A través de los ojos de estas jóvenes deportistas la película quiere explorar por qué es tan importante para las mujeres practicar deporte y cómo el aparentemente simple acto de surfear pueden convertirse en un medio creativo y poderoso para el cambio.
La repercusión internacional de ‘Into the sea’ ha sido tal que Easky Britton y Marion Poizeau decidida a fundar en 2013 la ONG ‘Waves of Freedom’, un medio para aportar a través del surf capacidades y seguridad en sí mismos a los miembros más vulnerables de la sociedad iraní, “especialmente mujeres y niñas”, con el fin de fomentar cambios en su comunidad y en la sociedad.
Poizeau, añade que el documental ha permitido cambiar la “perspectiva” que los medios proyectan sobre países como Irán.
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