LONGBOARD PARA MEJOR TU TÉCNICA DE TABLA CORTA

Entrenamientos físicos, entrenamientos de la técnica en el agua. Es cierto que para mejorar en surf tenemos que centrarnos en ciertos aspectos.

Pero, hay veces que, como todo en la vida, lo que debemos hacer es desconectar. Debemos olvidarnos y hacer un “reset” a nuestra mente para volver con fuerzas a incluso lo que más amamos.

Y es que, prueba de ello es la fluidez que Corey Colapinto gana en su tabla corta gracias a la práctica del longboarding. Hace poco, bajo su propia experiencia, ha hablado para Surfline para revelar cómo esta práctica ha benefiado a su surf en shortboards.

Fluidez

Todo surfista sueña con conseguir surfear bien. Pero, surfear bien es cuestión de estilo, algo diferente para cada uno. La fluidez sobre una tabla es sinónimo de estilo.

Corey Colapinto, un surfista de San Clemente que creció compitiendo en shortboard, decidió tomar un camino diferente: longboarding. Una disciplina que le ha abierto una nueva rama de posibilidades en su práctica con la tabla corta, ganando fluidez y un estilo propio.

Corey se inició en la competición junto a sus primos, Griffin y Crosby Colapinto, pero pronto la dejó al darse cuenta de que no le apasionaba.

Fue su padre quien le introdujo en el mundo del longboarding. El quería ir a surfear días pequeños, y para tener la compañía de su hijo, le compró un longboard para que pudiesen disfrutar juntos. Su padre le enseñó a moverse encima de un longboard, y Corey se dio cuenta de que ese estilo “relajado” realmente le gustaba, ya que le hacía olvidarse de la presión de la competición y disfrutar tal y como hacía cuando pisó una tabla por primera vez.

“Fue mi padre, con el que terminé haciendo longboard, y eso me devolvió a mis raíces como surfista, divirtiéndome sin importar las condiciones. Con un longboard puedes coger cualquier ola, aquellas que nadie quiere y realmente disfrutarla”.

El longboard ayuda a mantener a un surfista en forma para no perder ritmo. Un longboard es la mejor opción para esos días de olas de verano, casi flat, en los que con una tabla larga disfrutas sin importar lo que haya.

“Con un longboard, puedes surfear casi todo el tiempo para poder mantener fuertes los mismos músculos. Luego, cuando llegan las olas y coges un shortboard, no es tan difícil volver al ritmo de las cosas”.

Practicar longboard ayuda a marcar un estilo propio. Ayuda a relajar tu mente en el agua y olvidarse de cualquier cosa, incluso de los entrenamientos para mejorar la técnica en nuestro surf.

“Creo que el longboard ayuda a resaltar tu estilo. Pero lo que realmente hace es que te ayuda a olvidarte del estilo. Te das cuenta de que no tienes que trabajar tan duro. Puedes pararte en ciertas partes de la ola y dejar que el agua haga el trabajo, en lugar de bombear todo el tiempo. El longboard te enseña cómo usar más la energía de la ola, en lugar de usar siempre la tuya”.

Si eres un shortboarder y todavía no has probado un longboard, ten paciencia. Al principio estarás ansioso y todo te parecerá cámara lenta, pero verás que realmente el longboard podrá beneficiar a tu surf de tabla corta.

“Comencé un poco ansioso surfeando en longboards. Corría hasta la punta antes de que fuera el momento adecuado. Pero luego me di cuenta de que no tenía suficiente velocidad, por lo que siempre perdía la ola. No se trata tanto de correr hasta la punta, si no también de volver a la cola; en longboard hay que tener paciencia”.

Finstinct ft. Corey Colapinto from www.KORDUROY.tv on Vimeo.

Foto de portada : Vissla

Surfer Rule
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