12 Sep INCINERACIÓN DE RESIDUOS, ¿SOLUCIÓN O PROBLEMA?
Con las condiciones de seguridad adecuadas, la incineración de residuos puede ser una solución para tratar la basura que arrojamos. No obstante, muchos defienden que puede ser un proceso que contamine el medio. Mientras unos hablan de “valorización de residuos”, otros hablan de contaminación.
¡Os contamos en qué consiste el proceso y qué gases pueden contaminar nuestra atmósfera!
Quemando basura
La incineración de residuos es un proceso de tratamiento de residuos que implica la combustión de sustancias orgánicas contenidas en los materiales de desecho.
La incineración convierte la basura en cenizas, gases de combustión y calor, que puede ser utilizado para generar energía eléctrica. Muchos, utilizan el término “valorización de residuos”, para referirse al aprovechamiento de la energía térmica desprendida en la combustión para generar energía eléctrica.
Según explican responsables de Calidad Ambiental, de los materiales que se incineran, alrededor del 40% corresponde a plástico no reciclable; entre 30-35% a papel y cartón sucios y por tanto no aprovechables; y un 10-15% a trapos y maderas.
“En total, el poder calorífico supera las 2.500 kilocalorías por kilo. Suficiente como para generar energía eléctrica”.
Y es que la quema de estos materiales en el horno provoca que el agua que circula por las tuberías de la caldera se transforme en vapor a mucha presión, capaz de mover una turbina y producir electricidad.
En definitiva, la incineración tiene beneficios particularmente fuertes para el tratamiento de ciertos tipos de residuos donde los agentes patógenos y las toxinas pueden ser destruidos por las altas temperaturas.
No obstante, en algunos países los incineradores construidos a menudo no incluyen la separación de materiales para eliminar los materiales peligrosos, voluminosos o no reciclables antes de la combustión. Estas instalaciones son las que pueden suponer un gran riesgo para la salud y la ecología.
Gases contaminantes
A pesar de que gestionado de la forma correcta y con la seguridad adecuada, puede tener grandes beneficios, son varios los ecologistas que han denunciado reiteradamente la emisión de compuestos contaminantes.
“Incluso si se cumpliera la normativa a rajatabla, sus chimeneas liberan gases tóxicos que aunque en cantidades mínimas se van acumulando”.
Las normativas son restrictivas respecto a las emisiones de las incineradoras, especialmente en lo que respecta a las dioxinas y furanos, dos partículas cancerígenas resultantes de la cremación de materia orgánica.
Un Producto de Combustión Incompleta (PIC) es cualquier compuesto que no haya sido identificado a través de los análisis de los residuos que alimentan el incinerador, pero que se encuentra en los gases de salida. Estas sustancias, son a veces más tóxicas y difíciles de destruir que los compuestos que les dieron origen. Su cantidad depende de la composición de los residuos que se queman, las condiciones de combustión y de las condiciones meteorológicas.
Los PICs son liberados al medio ambiente a través de la chimenea, en las cenizas, y contaminan altamente. Las dioxinas y furanos representan tal vez los PICs más preocupantes.
Para muchos, la quema de basura es incompatible con el RECICLAJE y COMPOSTAJE, que es en la actualidad, una alternativa ecológica para la eliminación de residuos.
Un debate que está abierto… ¿La incineración, un símbolo del anti reciclaje o una oportunidad para combatir el problema de las basuras?
No Comments