30 Ene CÓMO GENERAR MÁS VELOCIDAD

En el complejo proceso de aprendizaje del surfing, ser capaz de generar velocidad en todo momento adaptando siempre los movimientos en virtud a la energía de la pared, es un avance prácticamente Newtoniano. Vamos a examinar paso por paso a ver qué demonios están haciendo los surfistas que parecen volar sobre el agua.

Empezaste a surfear hace no demasiado pero ya has averiguado cómo remar olas, cogerlas hacia ambos lados con soltura y surfear tranquilamente sobre sus paredes. Pero, tú sabes que en realidad desearías ir más rápido para poder hacer lo que tu mente está imaginando. Intentas bombear la tabla de alguna manera porque es lo que te pide el cuerpo, pero sigues sin poder ganar velocidad con soltura. La clave está en la compresión. La misma compresión que emplea un skater para sacar la máxima energía al bajar una rampa y exactamente la misma compresión que emplea un snowboarder al bajar por una pared empinada. Todo consiste en conectar la energía de la ola, con la gravedad a través de tus movimientos.

Nada más coger la ola y situarte en la pared adecuadamente, comprimes tu posición bajando los brazos y flexionando bien tus rodillas mientras desciendes la ola, pronto llega el punto en el que tienes toda la energía acumulada de la bajada en tu poder, y estás en un sitio favorable para emplearla (punto A). Es entonces cuando tienes que hacer todo lo contrario; estirarte exageradamente con los brazos guiando el movimiento hacia la dirección deseada (generalmente hacia delante con la pared o el labio), verás que la tabla ahora sale velozmente en la dirección de tus brazos.

Cuando llegues al punto deseado (digamos punto B), es el momento de juzgar el siguiente movimiento, y si necesario, volver a comprimir para bajar la ola esta vez no necesariamente del todo. Si crees que es necesario mantener esa velocidad durante toda la ola, lo recomendable es quedarse repitiendo el movimiento compresión-extensión con los brazos y el cuerpo en la parte superior de la ola. Si quieres bajar y no perder velocidad, tendrás que volver a comprimir tu cuerpo y sacar la máxima fuerza de la ola posible.

 En el fondo en un principio bastante simple traducido a movimientos que se tienen que adaptar según cada ola, pero se puede aprender a generar velocidad de otras maneras y entender los movimientos pertinentes.

Puedes pillar un patín e ir a una rampa para practicar el movimiento con los brazos (guiar la dirección deseada) y la compresión y extensión del tren inferior (generador de velocidad) para mejorar tu tiempo del punto A al punto B. Pero recuerda, en el surf lo más importante no es hacer movimientos determinados que siempre funcionan (como en una rampa de cemento), la clave está en entrar en ritmo con la ola y saber juzgar e interpretar correctamente la pared. Es casi tan importante entrar en el, empleando un término inglés que me parece muy oportuno, momentum de la ola, como ser capaz de controlar la movimientos que hacen que no pierdas velocidad en ningún momento.

 Si prácticas los movimientos y sobre todo lees cada vez mejor las olas y llegas al punto deseado con mayor rapidez, pronto estarás desarrollando maniobras con un control y una facilidad que nunca hubieras pensado.

Yo siempre lo digo, ir rápido en cualquier deporte es lo que marca la diferencia (ski, snow, skate…), los profesionales de estos deportes impresionan en vivo principalmente por la energía que llevan cuando ejecutan sus movimientos, siempre muy veloces. Pues en surf es mucho más exagerado, porque la velocidad es la clave para poder empezar a aprender ciertas maniobras, digamos que, sin velocidad no puedes hacer un buen giro (no lo terminas, te caes…), pero podrías hacer un buen heelflip con un patín. Así que para poder practicar maniobras completas y mejorar, saber generar velocidad adaptando tus movimientos a las necesidades de la pared y dirigir tu tabla bajo control, es un paso esencial.

Fotos por Smoothstar