27 May CUESTIÓN DE PERSPECTIVA
Algunos miden el tamaño de las olas según las ven, por delante, en cambio otros, lo hacen por detrás. No todos coinciden. Para unos son 2 metros y para otros 3, o 1.5. Es una cuestión de perspectiva.
Cuando entramos a surfear, a veces nos parece que no estamos teniendo “nuestro día”, cogiendo pocas o malas olas. Entramos en bucle y pensamos que todo es culpa nuestra. Que lo estamos haciendo mal. Y muchas veces tan solo se trata de cambiar nuestra perspectiva y darle la vuelta a esa situación. Si lo hacemos, no sólo seremos capaces de darle la vuelta a nuestro día de surf, también lo haremos en muchos otros aspectos de nuestra vida.
“No hay hechos, solo interpretaciones” – Nietzsche.
Hace más de un siglo de esta frase, y hoy sigue siendo igual o incluso más relevante. Para cada cosa hay una multitud de puntos de vista. ¿Quién decide lo que está bien y lo que está mal? Todo es cuestión de perspectiva.
La perspectiva es subjetiva porque se basa en el juicio humano, los valores y la experiencia. Pero, ¿y si es tu perspectiva la que te está frenando de coger esa ola? Dicen que el surf es como la vida. Y es que, cambiar tu punto de vista, puede cambiar tu vida.
”La basura de uno es el tesoro de otros”.
Belleza en el ojo del observador
Desde el momento que naces, estás condicionado a pensar de una cierta manera y sin que lo sepas, la cultura familiar y las experiencias son las que te hacen como eres, tanto las buenas como las malas, lo que afectan a tu forma de ver la vida.
Tu perspectiva está naturalmente sesgada, y se fundamenta en todo lo que has pasado a lo largo de tu vida, tu disposición innata y las influencias que te han afectado.
Una persona puede ver un vaso lleno por la mitad si es optimista, mientras que otro lo verá como un vaso medio vacío.
Ninguna experiencia es realmente objetiva, sino más bien subjetiva. Esto no es algo ni bueno ni malo, pero puede llevarte a tener nociones rígidas sobre lo que crees que es correcto, haciendo que excluyas el punto de vista de otra persona.
Tan solo cuando dejas ir percepciones fijas sin renunciar a tus valores o ser fiel a ti mismo, creces como individuo.
El poder de la perspectiva
El poder de la perspectiva puede ser realmente liberador y cada día te puede ayudar a afrontar problemas y minimizar las presiones. Un superpoder que te puede ayudar a convertir una montaña en un grano de arena, a convertir una mala historia en una buena y darle una vuelta a tu vida.
Sabemos que dos personas pueden mirar a la misma cosa y ver cosas diferentes. La perspectiva no es una verdad, tan sólo una opinión. Cuando abres tu mente y retas tu visión preconcebida, te permites ver las cosas con más sabiduría y compasión, no solo para ti mismo sino para aquellos que te importan. Usar herramientas como la ecuanimidad y la empatía, con refuerzos positivos, pueden reconducir tu mente y cambiar prejuicios preconcebidos.
Si estás preparado para cambiar la forma en la que ves una cosa, inevitablemente cambias lo que ves. Una hoja de hierba en tierra estéril puede ser señal de esperanza o desánimo, depende de cómo lo mires. Y significa que debes observarte a ti mismo para decidir qué forma de pensar traes a tu forma de ver el mundo.
Miguel Ángel Cueto Liaño.
Psicólogo Clínico – Hipnosis
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