04 Feb ¡¡FREE SURF EN LIBERTAD DE SURF!!

Salvo “valientes ignorantes”, los propios deportistas suelen ser conscientes

tanto de sus límites como de los riesgos.

Texto Víctor Gallego

Que el mundo se está volviendo loco ya no es una noticia que sorprenda a nadie. Cada mañana, si alguien enciende la radio, la televisión o abre el periódico, se dará cuenta de que las noticias que nos rodean parecen estar escritas por el guionista de una serie Z. Muros insalvables, vetos absurdos y prohibiciones que no lo son menos.

Estos días se hacían eco varios medios especializados del sector de un incidente en una playa de Barcelona. Varios surfistas eran expulsados del agua por practicar surf en unas condiciones en las que el baño estaba prohibido. Los surfistas, además de quedarse sin surf, se enfrentaban a la posibilidad de ser multados si se hacía caso omiso a los agentes urbanos de la ciudad condal, que exigían el cumplimiento de una ley obsoleta e inútil.

Una ley en la que no se diferencia entre bañistas y surfistas. Por lo tanto, cuando en una playa se presentan unas condiciones que no son aptas para el baño, los agentes, se ven obligados a expulsar del agua a los “bañistas” que en ella se encuentren, aunque se trate de deportistas que necesiten de estas condiciones para practicar su deporte. Algo tan absurdo como si, tras los efectos de una nevada, la guardia forestal prohibiese la apertura de las estaciones de esquí.

Evidentemente, en la práctica de estos deportes existe un riesgo, un riesgo que suele ser la propia esencia del deporte, que salvo “valientes ignorantes”, los propios deportistas suelen ser conscientes tanto de sus límites como de los riesgos. Ellos mismos asumen las consecuencias de sus actos y no son necesarias leyes ineficaces, pero si normativas constructivas.

Para conocer la actual situación de este tipo de leyes, las cuales responden más a modelos de organización enfocados a turistas que a los demás usos que se pueden realizar en una playa, hablamos con el órgano que debería responder por estos deportistas a nivel nacional, la Federación Española de Surf.

Desde la institución, nos confirman que están trabajando en esta problemática. También revelan que, aunque haya sido la playa de Barcelona la que ha tenido la repercusión en los medios, este tipo de problemas se sucede a lo largo de muchos de los spots que hay en la costa española. Hay todavía muchos ayuntamientos que se regulan por normas y leyes que no responden a la realidad que se vive en las playas. La actualidad ha cambiado radicalmente, pero las leyes siguen igual que en los tiempos de Pajares, Esteso y las suecas en Benidorm.

Desde la Federación, nos señalan que “es un tema que nos preocupa y, por ello, nos hemos puesto en contacto con el Ayuntamiento de Barcelona para intentar solventar este tipo de incidencias.”

Además, nos confirman que no es la primera vez que ocurre y que “como ya hemos hecho en anteriores ocasiones, intentaremos mediar en pro de la normalización de la práctica del surfing en Barcelona y en otros ayuntamientos en los que se sucede el mismo problema. Donde la gestión de las playas no está asociada directamente al departamento de deportes.”

La resolución de este problema, que no es puntual y sucede desde hace ya tiempo, alberga diferentes soluciones. Una de ellas es la que actualmente está desarrollando la FES, que como señala: “desde la institución estamos trabajando con profesionales del sector en un nuevo modelo de gestión del uso de las  playas que contempla todo lo relacionado con la práctica de nuestro deporte”.

Un modelo en el que no sólo se habla de situaciones como la que está sucediendo estos días en Barcelona, sino que también se recogen otros problemas como los que nos indican desde la propio institución, “este es el que ha saltado a la prensa, pero a nosotros también nos llegan quejas de muchas playas en las que, en un intento de delimitar las zonas a los surfistas, se ven desplazados a zonas sin olas… los bañistas acaban relegados a zonas de surf y las escuelas a zonas de bañistas, empeorando así la seguridad de todos los usuarios de la playa”.

Este prototipo de ordenación de playas también contempla el problema al que se enfrentan muchos arenales que se ven atestados, durante algunos periodos del año, por turistas, bañistas, surfistas y alumnos de escuelas de iniciación.  En este sentido, se aboga por la normalización de la relación entre las actividades asociadas al surf y la seguridad de los bañistas.

Un modelo que se espera no tarde en salir, y además, con el que se ahorrará que este tipo de noticias se dan eco en los medios. Una señal más de que los tiempos están cambiando y con ellos nos debemos ir adaptando. Los problemas que, hoy por hoy, acechan el mundo en el que vivimos son suficientes como para que la práctica de un deporte no lo sea. El deporte es y debe ser un ejemplo y una manera de evadirse y olvidarse que este planeta tal como lo conocíamos, ha cambiado.